O quizás debiéramos decir Washington D.C., Distrito de Columbia, para diferenciarlo de ese otro Washington estado, al otro lado de la nación.

     La capital de los Estados Unidos es lo menos parecido a Nueva York. Grandes avenidas con poco cemento, mucha zona verde y varios lagos. La zona que visitamos concentra la mayoría de los monumentos y edificios de la ciudad. Y vimos casi todo lo que hay que ver en un autentico maratón de construcciones.

     El primero, el capitolio, sede del gobierno de la nación tantas veces visto.

     Cuando salimos de Nueva York caía un fina lluvia sobre la ciudad pero aquí el sol lucia y picaba con toda intensidad.

     El capitolio se encuentra en el comienzo de una gran avenida plagada de museos (todos gratuitos), bibliotecas y otros edificios del gobierno. En algunos jardines se exhiben figuras artísticas como esos globos terráqueos de colores y figuras que muestro abajo.

     Pongo además un pequeño video You tube que grabé allí.

                                               
     Luego continuamos pasando cerca del edificio del FBI (arriba), el exagerado obelisco del monumento a Washington que se ve desde cualquier sitio y el monumento a Jefferson, dentro del edificio clásico cuadrado por delante y redondo por detrás.

     Una paradita y un tour por el cementerio de Arlington donde descansan los restos de John Fitzgerald Kennedy y Jackelinne Onassis y la consabida llama eterna. Las imágenes de las lapidas en fila se ha repetido miles de veces en miles de entierros ficticios en el cine norteamericano.

     De camino al monumento de Iwojima (el de las películas de Clint Eastwood) pasamos cerca del Pentágono (justo cuando el guía nos contaba que desde el atentado del 11 S estaba restringido el espacio aéreo se me ocurre sacar una foto del edificio con un avión encima).

     Cuando llegamos al monumento no se podía pasar de modo que tuvimos que verlo de paso desde el autobús.

     Continuando con la peregrinación llegamos al Lincoln Memorial (este me sonaba de algo), con una bonita vista del obelisco justo enfrente (¿se acuerdan de Forrest Gump?)
     La ultima visita era, como no, la Casa Blanca. A sus puertas, algunos manifestantes pacíficos reivindicando no se que cosa. El ala que vimos es la del pórtico cuadrado, recuerdo algunas imágenes de otra entrada con un soportal redondeado.

     El edificio se encuentra frente un parque plagado de estatuas conmemorativas y de turistas.

     Mas tarde almorzamos en una hamburguesería en el museo del aire y la aeronáutica que forma parte de la Smithsonian y sin tiempo para mas emprendimos el camino de vuelta a Nueva York donde llegamos pasadas las 9 de la noche.