SAIGÓN

     Dos noches dormimos en el Signature Saigon Hotel en una habitación muy confortable con una gran tele de plasma y con bañera de hidromasaje (aunque no la utilizamos) y un ordenador con conexión a Internet (tampoco lo utilizamos).

     Muy céntrico, aunque estuvimos de aquí para allá todo el tiempo, cenamos las  dos noches en el cercano mercado de Ben Thanh, un mercado cubierto que cuando llega la noche se traslada al exterior por las calles adyacentes. La primera noche una lluvia torrencial obligó a cerrar casi todas las tiendas (ver video). La segunda, pudimos pasear entre las tiendas repletas de gente pero con un genero mas dirigido a vietnamitas que a turistas con decir que no pude encontrar calzoncillos talla XL que me hacia falta comprar.

     La primera visita de la ciudad fue el Museo de Recuerdos de la Guerra (antes Museo de los Crímenes de Guerra), un museo muy moderno donde llama la atención las fotografías de las victimas del "agente naranja" y los hijos nacidos con malformaciones. No expongo ninguna imagen de esta sección, de hecho, pasé por allí sin tocar la cámara.

     También se exponen algunas armas, bombas y uniformes estadounidenses utilizados en el combate. Y una sala dedicada a varios fotógrafos de guerra con algunas instantáneas célebres.

     En el exterior se exhiben tanques, aviones y helicópteros de la contienda.

    Otra parada curiosa fue en el templo Chino de Thien Hau, muy ornamentado y con varios salones repletos de figuras y dibujos en puertas y paredes. No puedo contar nada mas del templo porque el guía que tuvimos en el sur (definitivamente, el peor de todos) no soltó palabra mientras lo recorrimos.

     Allí mismo compramos y firmamos una larga varita espiral de incienso que colgamos del techo para dar testimonio de nuestra visita.

     De allí fuimos al Palacio de la Reunificación con mas valor histórico que estético ya que fue el palacio presidencial de los survietnamitas.

     El exterior con grandes jardines y fuentes esta acotado con altas verjas metálicas (una de ellas derribadas por un tanque norvietnamita y fotografiado para la posteridad), algunos vehículos militares adornan el conjunto.

     En el interior se suceden salas de reunión y de recepción de embajadores, un bunker, en el sótano, con antiguas emisoras y equipos de comunicación y un helipuerto en la azotea.

     Aun nos dio tiempo a visitar algunas otras curiosidades turísticas de Saigon: El Mercado de Ben Thanh repleto de todo tipo de frutos secos, dulces y salados, la catedral de Notre Dame y la oficina central de correos.

     Como en Hanoi las casas tienen una minúscula fachada y una altura y profundidad apreciable ya que así sortean el pago de impuestos. Y como allí todos los bajos son comercios de cualquier tipo o género.

     Después de pasar 2 noches en Saigon, era turno de acercarnos al delta del río Mekong. Viajaríamos a Can Tho.